Voluntariado: «La simplicidad de la vida está en Camerún», Sergio Chuvieco

Persona reconocida por su simpatía, Sergio Chuvieco es un cooperante que destaca por su dinamismo y su amor por el trabajo bien hecho en una vida dedicada al voluntariado.

Médico de nacionalidad española, Sergio desembarcó en Camerún para realizar un voluntariado con objetivos bien claros que no tardó en alcanzar a lo largo de su primer año en tierras camerunesas. Evacuaciones médicas nocturnas, situaciones desesperadas de pacientes allí donde tomara un desvío no han sido suficientes para pararlo.

Tenía 16 años cuando escuchó hablar por primera vez de Zerca Y Lejos, pero no fue hasta los 23 años que probó la experiencia de irse un mes en 2014 para conocer de primera mano las realidades de las que tanto había escuchado junto a las primeras Campañas Integrales de Desarrollo (CIDS).

Un viaje dónde descubrió todo ello con una mirada inocente y que le suscitó un amor incondicional por las actividades dirigidas a ayudar al prójimo, algo que le motivó a volver a Camerún por un periodo más largo, lo suficientemente largo para darle tiempo a aportar su granito de arena.

Volvió con una idea más clara sobre el pueblo pigmeo Baka y con el objetivo de ayudar al desarrollo de los proyectos de la organización que intentan aportar un mejor acceso a los cuidados sanitarios de las poblaciones más desfavorecidas del sur de Camerún a través de dispensarios y clínicas dentales repartidos por los departamentos de Dja y Lobo en Bengbis, Djoum y Mintom.

Comenta que “las enfermedades de la población Baka se ven por todas partes, la mayoría son tratables, pero la falta de apoyo complica el diagnóstico”.

Opina que las soluciones residen en la sensibilización de la población Baka y la mejora de las condiciones alimentarias entre otras. Tiene la esperanza de que un día, tarde lo que tarde, toda esta situación cambiará.

“En un año en Camerún he aprendido la simplicidad de la vida, la humildad, que el limitado nivel de vida no impiden vivirla, y que sin demasiada tecnología es posible ser feliz.» Con estas palabras invita a romper con los prejuicios y a descubrir las realidades, tanto las buenas como las malas, por uno mismo.

Este infatigable apasionado de la cooperación internacional volverá muy pronto con una motivación renovada para fortalecer a las personas que como él trabajan duro para conseguir los objetivos de un mañana mejor.