Desde que tengo uso de razón siempre quise ser médico, nada podía hacerme cambiar de opinión. Mi visión de la Medicina fue cambiando mucho a lo largo de los años, pero fue cuando en la facultad conocí Zerca y Lejos y viajé por primera vez a Camerún, en el verano de 2005, cuando esa visión cambió radicalmente, y desde entonces enfoqué todos mis estudios y aprendizaje a formarme para aportar mi granito de arena para cambiar el mundo desde mi profesión. A mí esta experiencia me cambió la vida, y ahora trabajo a diario para cambiar las vidas de los demás, tanto Zerca como Lejos, porque creo que otro mundo es posible si todos luchamos por ello.